Ella.

Se encuentra llena de objetos, llena de colores y sombras que se fusionan entre sí. Llena de recovecos y contornos difusos... y no tanto. Llena de agujeros y espacios vacíos. Pero el vacío va más allá de lo que se pueda delimitar físicamente. A veces no se puede tocar, no se hace material. Va profundo.

Se encuentra sentada con el alma recostada, se encuentra caliente pero muy fría por dentro. Se encuentra agitada y serena. Grande y pequeña. Pero siempre en el mismo sitio, estática, quieta. Y allí es, donde ella está, donde ella yace, donde ella habita. Permanece en tal sitio a la espera de algo que le sea familiar. Una cara, una mirada, una sonrisa, una fragancia, un destello, un roce. Un recuerdo, quizás?. Un abrazo tal véz. Está buscando, pero no sale a descifrar, porque sencillamente no se mueve ni camina, pero avanza. A veces mucho, a veces poco. Sin un sentido marcado, sin una dirección estable. Porque no es objetiva, no se puede, por más de que se intente. Bueno... capaz no lo haya intentado tanto. Es mas fácil si viene solo, sin esfuerzo, sin impulso.

Pulso? Sí. Hay. Lento y calmado, pero a la vez agitado.

Se la ve quieta, con la mirada fija, y si se pudiera sacar de su mente una nubecita (estilo historieta) seguramente diría "Te extraño". Entre otras cosas. Pero ningún vocablo español me permite teclear con certeza el contenido casi mágico, casi tonto, de tal nube.

Sus sombras no son tan oscuras, y sus colores más bien apagados. Las pocas palabras que ha de pronunciar se escucharán solo a lo lejos... Solo bien lejos, y para quien quiera recibirlas, percatarse de las mismas. Sus gritos son ahogados, sus lágrimas secas y sus huellas invisibles.

De seguro sus ideas son tontas, sus deseo absurdos, sus metas inalcanzables y sus pensamientos... simplemente inexistentes.

Locura? No. No hay nada de locura. Ni se parece a la locura. Dista mucho de serlo. Es totalmente cuerda, quizás la persona más cuerda que ella misma haya conocido jamás. Pero es dudoso que así sea? Entonces capaz... Capaz sí. Puede tener cierta cuota de locura, pero locura sana. Eso espero. Eso creo. Eso rezo.

Sería más fácil, de seguro, sin tanto espacio en blanco en el medio. Le encantaría sentirte vibrar.

Memoria infantil.

Hay cosas que nos recuerdan viejos tiempos. Viejas épocas, buenos y malos momentos, pero en fín, nuestro pasado como pequeños.

Hay cosas que nos hacen despertar sentimientos olvidados, momentos compartidos. A veces, sin motivo capaz, con el correr de los años solemos olvidar lo que antes nos hacía bien, lo que nos complacía, lo que nos alegraba una tarde, una mañana, una noche.

A veces no necesitamos verlo; un olor, una textura también pueden remontarnos a aquellos tiempos en donde lo más preocupante que teníamos era, por ejemplo, saber el horario de nuestra serie favorita sin perdernos ningún capítulo. Hoy las ocupaciones cambiaron, los gustos también; pero el hecho de recordar aquello que embelleció nuestra infancia, aún nos llena el alma. O por lo menos yo mantengo dicho sentimiento firme.

Me da mucha bronca haber sepultado grandes recuerdos de mi vida, que sé que de recordarlos me asombrarían de lo hermosos que deben ser... Pero mi memoria a veces me juega muy malas pasadas. No funciona como yo quisiera. No sé si es por una causa desconocida que en realidad tenga sentido, o si es por distracción o alguna especie de bobera temporal que me esté afectando. Lo que sea, como se llame, no pude resistir esta dulce fotito de Mr Hipo, un personaje de antaño que si mal no recuerdo era del canal Magic Kind.

Ojalá alguien llegue a ver esta foto.

Ojalá alguien llegue a recordar tardes como yo, a upa de mi papá viendo dicho dibujito...

Saludos.